Orgullo Madrid 2013

Como cada año desde hace cuatro, Las Conejeras hemos  acudido al Orgullo de Madrid, por lo que como nos pasa siempre, estamos atravesando una dura época de depresión post Orgullo y por eso estamos tan ausentes. Es todo tan idílico allí, joder…pero que hetero es todo ahora.

Quién no haya ido al Orgullo de Madrid, uno de los más grandes de Europa, debería, este año hemos acudido aproximadamente 1 200 000 personas,  y es que acudir a Chueca y más en "plena época", es comparable a peregrinar a La Meca, con la diferencia que aquí se viene para reivindicar derechos y pecar, para los que lo consideren un pecado ser libres y disfrutar.  

Es UNA MARAVILLA, a la par que triste, porque debería ser así todo el año, poder ir agarrada de la mano de tu pareja sin que nadie te observe con extrañeza, te juzgue, ya lo haga con  aprobación o con desprecio, ver a toda la gente siendo ella misma, invadir la capital de España de colores, igualdad y respeto.

Yo también necesito abanicarme ahora. 

Vayas donde vayas encontrarás ambiente, fiesta, mujeres de todos las edades, colores y prototipos de lesbiana, mogollón de tetas y pectorales juntos.

Una de las razones de acudir al Orgullo es la fiesta, la ciudad se transforma en un bar de ambiente gigante abierto las 24h del día cinco días a la semana. Pero la razón fundamental por la que hay que acudir es hacerse ver, reivindicar unos derechos que parece ser que este año se han empeñado  en quitar. Y es que no desfilamos, nos manifestamos.

Este a más de uno sí que le ha hecho ver el cielo.

Este Orgullo hemos bebido, reído, follado, conocido a grandes personas y también ha habido muy gratos reencuentros, pero tenemos que reconocer que también nos hemos indignado, y es que es indignante todos los impedimentos que han puesto este año a la celebración, a eso hay que sumarle el cambio de recorrido, la presencia de antidisturbios, la vigilancia extrema en el Congreso  de los Diputados, el desalojo de plazas como la del Lazo (Vázquez de Mella) el jueves, la escasez de contenedores y de baños públicos…

Invadiendo Madrid. 

Marea desviada chupando sol.

Querida Alcaldesa por sorpresa de Madrid Ana Botella, no somos delincuentes, no nos vas a callar ni tapar, ni impedir que acudamos en masa a ser felices, no te daremos ese gusto, nos vamos a seguir casando, desfilando, manifestando y besándonos. El año que viene estaré allí de nuevo, disfrutando de la fiesta como una enana y disfrutando de poder reclamar al mundo nuestros derechos, ya que otros homosexuales del mundo no tienen tanta suerte. Y si es por tema de imagen o dinero, el Orgullo deja cada año más millones en Madrid que una JMJ y si es por la Marca España, la que os la estáis cargando sois los políticos, no nosotros. 

Algunos tienen más pecho que yo. 

Por cierto, me declaro fan de las lesbianas solidarias que nos arrastramos por el suelo para coger los condones que tiraban desde las carrozas para luego regalárselos a nuestros amigos con pene.